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¿Cómo implementa la RSE el sector tecnológico?

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El área tecnológica, que está a la vanguardia de la transformación digital mundial, ha empezado a aceptar la importancia de incorporar la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en sus políticas y planes de negocio. La importancia de la RSE en este sector va más allá de las presiones normativas o de imagen, ya que también responde a la necesidad de enfrentar retos éticos, medioambientales y sociales propios de su actividad.

Ejes principales de la RSE en el sector tecnológico

Influencia ambiental y digitalización responsable: un aspecto clave de la RSE en el ámbito tecnológico es cómo se maneja el impacto ambiental. Las grandes empresas en el sector tecnológico, ya sean fabricantes de componentes o encargadas de servicios en la nube, tienen una huella de carbono significativa. Estrategias como el empleo de fuentes de energía renovables en los centros de datos, la mejora en el uso de energía y la disminución de emisiones son esenciales. Una gran empresa mostró un caso ejemplar en 2023 al cubrir más del 70% de sus operaciones globales con energía procedente del viento y el sol.

Paralelamente, el diseño de productos bajo criterios de economía circular —como la reutilización de componentes electrónicos y la extensión del ciclo de vida de los dispositivos— cobra cada vez más protagonismo. Empresas que recogen y reciclan antiguos dispositivos, minimizando el desecho de aparatos electrónicos contaminantes, muestran el poder de la innovación aplicada con responsabilidad social.

Ética, confidencialidad y resguardo de información: la era digital introduce desafíos relacionados con la privacidad de los datos y los derechos digitales. Las empresas tecnológicas tratan la RSE a través de políticas claras sobre la gestión de datos y el desarrollo de sólidas herramientas de ciberseguridad. Se han puesto en práctica mecanismos avanzados de cifrado y procesos definidos para el consentimiento informado, asegurando el respeto a la privacidad de los usuarios.

Gigantes tecnológicos, ante escándalos por mal manejo de información personal, han visto la necesidad de reforzar equipos dedicados a ética digital y cumplimiento normativo. Este esfuerzo incluye también la lucha activa contra la desinformación, los discursos de odio y otros riesgos asociados al uso inapropiado de la tecnología.

Diversidad, inclusión y el entorno laboral: en este sector, la RSE promueve el impulso de la diversidad y la inclusión. Diversas empresas han lanzado programas para incrementar la participación de mujeres, minorías y colectivos históricamente subrepresentados en tecnología. Estas prácticas comprenden desde la revisión de políticas de reclutamiento hasta el ofrecimiento de mentorías, becas y entornos laborales accesibles y seguros.

Un ejemplo significativo es el de una empresa internacional de software que, en 2022, declaró su objetivo de lograr equilibrio de género en posiciones técnicas para el 2030, respaldado por incentivos y programas educativos en comunidades desfavorecidas.

Avances sociales en tecnología: más allá del comercio

Las iniciativas de RSE en el sector tecnológico no se limitan al interior de las compañías. A través del desarrollo de software y soluciones digitales, estas empresas diseñan proyectos con impacto social positivo, como aplicaciones de educación a distancia, herramientas de accesibilidad para personas con discapacidad y plataformas para mejorar la gestión de recursos sanitarios en países en desarrollo.

Los laboratorios de innovación social, impulsados por corporaciones y asociaciones del sector, han logrado fomentar la colaboración con ONGs y gobiernos para afrontar retos como la brecha digital, el acceso a la información y la alfabetización tecnológica en zonas rurales o desfavorecidas.

Desafíos persistentes y enfoques emergentes

A pesar de los progresos, persisten desafíos significativos. La obsolescencia planificada, el uso excesivo de recursos naturales en la fabricación de hardware y el sesgo en los algoritmos presentan problemas continuos. La claridad en inteligencia artificial, además de la evaluación ética de sus aplicaciones, es el centro de atención de entidades internacionales y grupos del sector.

Un enfoque emergente en la RSE tecnológica es la gobernanza colaborativa, donde empresas, entes regulatorios y la sociedad civil co-crean estándares de responsabilidad y buenas prácticas. La adopción de marcos globales, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible y los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos de la ONU, sigue influyendo en las políticas del sector.

La incorporación de la responsabilidad social corporativa en tecnología

El sector tecnológico, con su capacidad de influencia transversal, tiene en la RSE una herramienta estratégica para contribuir a una sociedad más ética, equitativa y sostenible. Su legado dependerá de tomar decisiones conscientes, anticipando riesgos y colocando al bienestar colectivo en el centro de la innovación. Son las acciones diarias, la transparencia y el compromiso con el entorno, las que determinan si el progreso digital contribuirá al bien común o ampliará las brechas existentes.

Por Otilia Adame Luevano

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